Pero si la situación resulta más que preocupante a nivel estatal, lo es aún más en Canarias donde, según las estimaciones oficiales, el índice de consumo es un 2,5% mayor que en el resto de comunidades autónomas. El Archipiélago es, de hecho la segunda comunidad con mayor índice de consumo, solo superado por la Comunidad Valenciana.
Según los datos de los Servicios Sociosanitarios de Atención a las Drogodependencias, la primera causa de adicción en Canarias continúa siendo el alcohol, seguido del cannabis; mientras que la cocaína se sitúa en tercer lugar y la heroína en el cuarto.
Durante el año pasado fueron tratados en las Islas por su adicción a la cocaína un total de 1842 personas. Esta cifra, sin embargo, constituye solamente la punta de un iceberg cuya profundidad total resulta difícil de establecer. Quienes asumen que tienen un problema con esta sustancia y deciden pedir ayuda son solamente un pequeño porcentaje de los adictos.
Según el Estudio de Alcohol y Drogas 2015-2016 del OEDT, el 12% de la población canaria confiesa haber consumido cocaína alguna vez en su vida; el 2,9% en el último año y el 1,8% en el último mes.
Los expertos advierten que ese 1,8% que consume una vez al mes ya se encuentra en una situación de riesgo, a pesar de la habitual sensación de "control" que la mayoría manifiesta. Quienes consumen de manera habitual, aunque aparenten llevar una vida normal, ya son adictos.
El perfil medio de este consumidor es el de un hombre - más del 80% de los consumidores lo son - de entre 35 y 54 años, si bien la edad a la que se comienza a probar la cocaína en Canarias son los 20 años.
MITOS Y REALIDADES SOBRE LA COCAÍNA
El consumo masivo de cocaína se ha visto estimulado por su asociación con el "glamour, el éxito y el poderío económico" y por la creencia, absolutamente infundada, de que se trata de una droga menos nociva que otras y "fácil de controlar" para consumirla solo ocasionalmente. La realidad es que los efectos sobre la salud física y psicológica provocados por la cocaína son extremadamente graves y genera un alto grado de dependencia.
Asociada también a los ambientes festivos, quienes comienzan a consumir cocaína lo hacen, habitualmente, por su supuesta capacidad para aportar energía en las largas noches de juerga. Lo cierto es, no obstante, que la cocaína solo tiene un efecto estimulante pasajero que dura entre 30 y 60 minutos, tras los cuales se produce un bajón intenso que causa decaimiento, cansancio y depresión.
Aunque también es frecuente la utilización de esta droga antes de mantener relaciones sexuales, por sus efectos estimulantes, el consumo de cocaína de forma continuada disminuye el deseo sexual, provoca problemas de erección y eyaculación en los varones y es motivo de impotencia e infertilidad.
GRAVES EFECTOS SOBRE LA SALUD
Los riesgos y efectos sobre la salud provocados por la cocaína son mayores a medida que aumenta la adicción a la sustancia. A medio y largo plazo, su consumo afecta al funcionamiento cerebral, puede provocar trastornos psíquicos como como ideas paranoides o depresión y también desencadena cuadros de psicosis y esquizofrenia.
El deterioro físico también puede ser muy grave por su afección a los sistemas circulatorio y respiratorio –es causa frecuente de infartos de miocardio e ictus - ,del mismo modo que puede producir complicaciones neurológicas y gastrointestinales.
Si la vía de consumo es nasal, también ocasiones pérdida del olfato, ronquera, hemorragias nasales e incluso la perforación del tabique nasal.
Por EUGENIO FERNÁNDEZ / CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
fuente. http://canarias-semanal.org/not/20847/canarios-y-valencianos-a-la-cabeza-del-estado-en-consumo-de-cocaina/
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